Relojes con Secreto – emociones en la infancia
Su primer día. O un día complicado. O porque es importante que lo tenga presente. Hoy os traigo una propuesta para trabajar las emociones en la infancia con elementos naturales: Los relojes con secreto.
Depende de cómo lo enfoques, esta propuesta puede ser válida para una amplia franja de edades. Porque a diferentes niveles y por distintos motivos los niños y niñas también viven circunstancias que a veces no son fáciles de gestionar. Y especialmente estos relojes están diseñados para esos momentos que a veces traen un extra de complejidad emocional.
Estos relojes guardan secretos. De esos secretos que llegan al corazón. Pueden marcar las horas – ficticiamente y como parte del juego – o pueden ser la pulsera familiar o cualquier otro nombre que consideréis oportuno (aquí es donde depende un poco de la edad y del momento particular del niño o niña). Lo importante de estos relojes es que por un lado muestran una cosa, y por el otro tienen una palabra secreta que roza la piel, que nadie ve y «yo sólo sé».
Seguro que habéis vivido alguno de esos días en que algo especial cambia la perspectiva del día; en que esa capa, esa galleta o ese reloj han sido importantes para afrontar una situación. Lo genial de estos relojes es que puedes crearte docenas de ellos y elegir el que quieras según el día, el color, la circunstancia a la que te enfrentas o el mensaje que necesitas sentir cerca y recordar. Y, como padre o madre, es otra muestra más de vínculo, de valor y unión.
A no ser que queráis realizarles un regalo especial, os aconsejo crear estos relojes con ellos y ellas, por pequeños que sean. Ahora veremos cómo hasta los más pequeños pueden participar en todo el proceso.
Participando en el proceso…
Básicamente lo que necesitamos es:
- Palo o rama del diámetro deseado para nuestro reloj
- Sierra
- Taladro manual
- Lija
- Pinturas (pinceles, rotuladores… lo que cada uno decida)
- Pirograbador (opcional para hacer diseños)
- Tornillo de banco
Lo que veis en esa foto es un kit, un mini-tornillo de banco multifunción que puede usarse como tornillo de banco, como perforador o herramienta para cascar nueces. En una pequeña caja tienes todo eso junto. Por otra parte necesitamos la sierra, que puede ser muy variada. Para manos pequeñas podríamos usar alguna como la de la foto o similar. Lo importante de las sierras es que sean ligeras, pero resistentes y seguras.
En el caso de que sean muy peques y sean los adultos quienes sierren, os recomiendo alguna como la de la foto. Y el mini tornillo de banco, para aquellas familias que no tenéis un banco de trabajo en casa, éste es genial para esto.
Básicamente, la sierra y el taladro son las dos acciones que tal vez las manos pequeñas, muy pequeñas estoy hablando, no puedan realizar aún. No obstante, aunque taladrar no puedan por cuestión de fuerza, siempre pueden probar y practicar en los agujeros que el adulto ha realizado. Es otra forma de practicar y entrenar destrezas. En la foto de aquí abajo veis un ejemplo de esto.
Pueden participar en la elección de las palabras, pueden escribirlas o, si no les apetece o es un regalo que queremos hacerles, pueden recibirlas y sentirlas. Sentir su efecto en el cuerpo. Y decidir en qué momento llevar el reloj de la risa, del valor, del yo puedo o del amor.
Y, como os decía antes, podemos darle colores, diversidad de correas en forma de lanas, hijos y cintas; lo realmente importante no va a estar a ojos ajenos, sino bien pegadito a la piel, donde se pueda sentir. ¿Os animáis a haceros un reloj con secreto?
Si te apetece, comparte tu proceso y sensaciones etiquetándome @innaturaspain con #relojesconsecreto